Para cumplir con mi meta de escribir, al menos, una entrada al mes me siento a las apuradas este 31 de octubre donde todos se preparan para la noche de brujitas.
Al tener una lista tan grande de libros y películas pendiente, hice TaTeTí para elegir sobre cuál comentar. El destino ha dicho que sea un clásico de Thomas Hardy, Tess la de los D'Urbeville, un libro que se me hizo que tiene mucho que ver con el destino.
La novela cuenta la historia de Tess, una hermosa joven proveniente de una familia rural pobre, cuyo padre inservible toma aires de grandeza al enterarse que su apellido puede ser de origen noble.
El destino es algo que se mezcla en la trama. Si el padre no se hubiera enterado de su "linaje", no se habría emborrachado, lo que huciese evitado que Tess tenga que reemplazarlo en su viaje con sus posteriores consecuencias.
La vida de Tess se verá marcada por dos hombres: por un lado, Angel, un muchacho de ideas progresistas y, por otro, Alec, el hijo de nuevos ricos que hace lo que quiere. Aviso que ninguno de los dos hombres se me hicieron agradables, Angel por su hipocresía y Alec porque me daba asco.
La novela ronda sobre un hecho trágico en la vida de una mujer como lo es una violación (no lo describe ni nombra, pero se da a enteder), y las consecuencias que acarraea para ella, marcándola para siempre, avergonzándola y llenándola de culpa, mientras el abusador continua su camino sin mayores problemas que su conciencia.
La virginidad, tan menospreciada en la actualidad, era uno de los mayores bienes de una joven "decente", al no poseerla más, a Tess le cuesta reconstruir su historia y, cuando logra confiar en alguien, es para volver a quedar defraudada y sola.
Es una historia trágica que es difícil de entender con una mirada actual donde el sexo prematrimonial es lo más común y donde casi nadie cuestiona las elecciones sexuales. En los fines del siglo XIX, la moral era muy distinta, en especial, muy estricta con la conducta femenina por lo que el libro contiene una fuerte crítica social y fue censurado en su momento.
Hay muchas versiones para cine y tv de éste clásico, la única que he visto es la miniserie versión del 2008, con Gemma Arterton como Tess, Eddie Redmayne como Angel y Hans Matheson como Alec.
Como dato anecdótico, para las lectoras anti fenómeno Christian Grey, les doy un motivo para que lo quieran un poco o al menos respeten a la autora, gracias a la mención de este clásico en las novelas tan comentadas, se volvió a editar Tess y pude comprarla después de mucho buscarla.
