Otelo: el moro de Venecia, es una obra de Shakespeare escrita a principios del siglo xv.
Es una historia llena de intriga, pasiones, pero sobre todo, de celos descontrolados.
La dupla de realizadores, Pepe Cibrián Campoy y Ángel Mahler, toman este clásico para su nuevo musical.
Como todos los musicales desde la puesta en escena de Drácula, Juan Rodó lo protagoniza magistralmente. Este barítono nos deja sorprendidos con sus interpretaciones y registro.
Los actores que representaron a Yago y Casio (Daniel Vercelli), hicieron muy bien su trabajo, demostrando poseer gran rango de voz, siendo éste último el que se destacó más.
Desdémona tarda un poco en salir a escena, y el personaje me resultó demasiado inocente,una princesa Disney, pero Georgina Frere, nos deleitó con una voz de soprano magnífica.
Aunque, sin lugar a dudas, quién más sorprendió al público, fue Bianca, un personaje inventado, tan ambicioso y cruel como Iago. Lorena García Pacheco la interpretó de forma estupenda, con gran personalidad y toda la potencia en la voz que requería el rol.
Pepe Cibrián Campoy escribió, dirigió y diseñó las coreografías del espectáculo. Angel Mahler compuso la música original y dirige la orquesta. Juan Rodó se hizo cargo de la preparación vocal.
Fui a ver la primera de las cuatro presentaciones que hicieron en mi ciudad, y me alegró ver al hermoso teatro, colmado de gente.
Espero que este equipo que llevan 25 años trabajando juntos, regrese pronto con una nueva producción.
Una entrada llena de música. Me gusta la ópera, pero en mi ciudad es muy cara una entrada. Yo tuve la ocasión de ver una en directo en la Arena de Verona y aún me emociono.
ResponderEliminarSaludos desde La ventana de los sueños
Tuvo que ser un gran espectáculo, me encantan las obras de Shakespeare.
ResponderEliminarUn saludo
Anabel, no es la ópera tradicional, sino una adaptación muy libre que se hizo sobre la obra. También era cara la entrada, pero son oportunidades que no se presentan todos los días.
ResponderEliminarIradai, fue muy buen espectáculo. Grandes interpretaciones.
muero por los musicales y el ballet.......me debo un espectaculo en el colon.sera cuando lo reinaguren!!!!!
ResponderEliminarbesines fiona
Fiona, también me gusta el ballet, pero las pocas veces que vienen a mi ciudad, las entradas tiene precios terribles.
ResponderEliminarSi te gustan mucho los musicales, también pienso que oportunidades como estas no las debes dejar escapar, y más aún si se presentan rara vez. Me imagino que disfrutasté de lo lindo.
ResponderEliminarNo soy aficionada a estas funciones, pero puedo dejar deleitarme alguna vez.
Saludos :-)
yo fui en el verano, la verdad es que fue muy bueno, aunque me gustó mas el año pasado que fui a ver El Fantasma de Canterville
ResponderEliminarsaludos!
Patricia, me gustan los musicales, sobre todo si están bien hechos. El viernes era un día para quedarse en casa (llovía y hacía frío), pero no me arrepentí de salir.
ResponderEliminaralmacks, si tengo que comparar los musicales de Cibrián-Mahler, me quedo con Drácula. No sé si fue por ser el primero, pero lo recuerdo con placer.
¿No aprovechaste para ver El fantasma de la Ópera?
y por estas cosas me gustaría vivir en Argentina.
ResponderEliminarHace ya bastante tiempo vi la obra, y el mes q paso gracias al electivo de la universidad la leí, debo decir que es una de mis tragedias favoritas de Shakespeare hasta ahora. ojalá se presente por acá algún día.
Espero que estes bien
La inmensidad de obras como ésta permite todo tipo de buenas adaptaciones. Se entiende de adaptaciones con sentido (no cosas de zombis y vampiros...).
ResponderEliminarkalid, en Argentina decimos que "Dios está en todas partes, pero atiende en Bs. As", jajaja. Así que también por acá hay pocos espectáculos de calidad. Saludos.
ResponderEliminarFernando, no es una mala idea pensar en Yago como una bestia chupasangre. jaja.