miércoles, 28 de enero de 2009

Angeles y Demonios


Terminé de leer este libro que me habían recomendado por ser ligero y fácil de leer. Ideal para las vacaciones, donde no tengo ganas de pensar demasiado.
Esta novela de misterio de Dan Brown, es una "precuela" de "El Código Da Vinci", su gran éxito de ventas. Nuevamente, nos encontramos como el simbologista de Harvard, Robert Langdon, que esta vez tendrá que impedir que una secta secreta, los Illuminati, destruya el Vaticano con una nueva tecnología, la antimateria.
Se involucra en semejante empresa al ser llamado por el jefe de una organización científica. Uno de sus empleados es hallado muerto con una marca a fuego y él es un experto en simbología. Lo trasladan inmediatamente desde Boston a Suiza en...una hora, en un avión ultra moderno y gran tecnología. En esos momentos, debería haber empezado a sospechar que el libro se pondría a delirar más.
Al llegar al laboratorio, conoce a la hija adoptiva del científico-sacerdote muerto, Vittoria Vetra, cuya descripción me recordó terriblemente a Christmas Jones (Denise Richards en The World is not Enough), supuestamente una brillante científica que se paseará todo el libro en diminutos pantalones cortos y musculosa blanca.
Cuando descubren que el Vaticano será atacado durante la elección papal, Langdon irá a tratar de detener el asesino y Vittoria lo acompañará para vengar a su padre y, para darle el toque romántico a la película...digo a la novela.
El delirio se hace cada vez más grande, en el Vaticano,conocen al carmalengo del difunto Papa, cuya descripción es de lo más ridícula. Un sacerdote de unos 35 años, joven, atlético y atractivo que, además, es piloto de helicópteros.
De ahí en más, Landgon se convierte en una mezcla de Indiana Jones y John McClane (Die Hard), buscando pistas en obras de arte de Bernini y esquivando la muerte.
Me habían dicho que el final me sorprendería, lamentablemente, no lo hizo. Desde que comencé el libro se me hizo evidente quién era el responsable de lo que sucedía.
Aunque ya sabía que era lectura ligera, no esperaba encontrar tantas situaciones disparatadas. El Código Da Vinci, también nos muestra un Langdon estilo Indiana Jones, pero las situaciones no son tan increíbles como las planteadas en este libro.
A su favor, la manera de narrar y de estructurar el libro en capítulos cortos, hacen fácil su lectura, a pesar de su volumen (606 páginas).
Como cierre, se viene la película para mayo de este año, otra vez con Tom Hanks en el papel del profesor de Harvard y Ewan McGregor como el carmalengo...comentarios aparte.Sin duda, promete mucha acción y locaciones magníficas (uno de los altares de la ciencia, está en La Agonía de Santa Teresa, una de las esculturas más bellas).Probablemente, la película se me haga más creíble que el libro.


sábado, 24 de enero de 2009

Los invito a mi partido



Ala de colibrí (Silvio Rodriguez, Cuba)


Hoy me propongo fundar un partido de sueños,
talleres donde reparar alas de colibríes.
Se admiten tarados, enfermos, gordos sin amor,
tullidos, enanos, vampiros y días sin sol.

Hoy voy a patrocinar el candor desahuciado,
esa crítica masa de Dios que no es pos ni moderna.
Se admiten proscritos, rabiosos, pueblos sin hogar,
desaparecidos, deudores del banco mundial.

Por una calle descascarada
por una mano bien apretada.

Hoy voy a hacer asamblea de flores marchitas,
de deshechos de fiesta infantil, de piñatas usadas,
de sombras en pena del reino de lo natural
que otorgan licencia a cualquier artefacto de amar.

Por el levante, por el poniente,
por el deseo, por la simiente.

Por tanta noche, por el sol diario.
En compañía y en solitario.

Ala de colibrí,
liviana y pura.
Ala de colibrí
para la cura.

lunes, 19 de enero de 2009

Little Dorrit (La pequeña Dorrit) BBC 2008 Muchísmos spoilers!!!


Vengo posponiendo el escribir. Las vacaciones y el excesivo calor me quitan las ganas de sentarme e intentar escribir algo coherente. Aunque rara vez lo consigo, ahora puedo culpar a las altas temperaturas.
Me gusta Dickens y las adaptaciones de la BBC, sobre todo si de ella se encarga Andrew Davies, quien tiene una larga lista de magníficas adaptaciones de grandes novelas: Pride and Prejudice (1995); Wives and Daughters (1999); The Way We Live Now (2001); Dr. Zhivago (2002); Tipping the velvet (2002); Bleak House (2005); Northanger Abby, (2007).
El pasado otoño inglés, se estrenó Little Dorrit, una de las novelas menos populares de Charles Dickens. Libro difícil de conseguir por estas latitudes porque hace años que sólo se consigue la versión “infantil” (quisiera conocer algún niño que la haya leído…entre mis alumnos seguro que no). La editorial Aguilar publicó, hace un tiempo, las obras completas de Dickens que, por mi ciudad, se podían adquirir salteadas en los kioscos de revistas.
La serie de 14 episodios, comienza con el nacimiento de Amy Dorrit (Claire Foy), dentro de la cárcel para deudores de Marshalsea.
Veinte años más tarde, Arthur Clennam (Matthew Macfadyen), regresa a Londres con su madre, después que estar fuera muchos años, tras la muerte de su padre. La madre de Arthur, una persona mala y que desprecia a su hijo, vive con sus sirvientes, Flintwinch y su esposa Affery, empleando como costurera a la “pequeña Dorrit”. Arthur y Amy se conocen en la casa y ella pronto se enamora de él.
Intrigado por el interés y buen trato de su madre con la joven, Arthur conoce a William Dorrit y comienza a investigar el origen de la deuda. Mientras tanto, reanuda relación con su ex prometida y corteja a una señorita que había conocido en el camino de regreso a Inglaterra.
En casa de la jovencita, conoce a Daniel Doyce, un inventor en busca de capitales, con el que se hace socio.
Gracias al señor Pancks (personaje que me recuerda a Guppy, no se por qué), descubre que el señor Dorrit es heredero de una fortuna que lo sacará de la cárcel. El carácter agradable del anciano, al liberarse y tener nuevo status, cambia. Se vuelve pedante, orgulloso y, el nivel social del señor Clennam le parece poca cosa, además de recordarle su pasado en la cárcel. Él y su familia, se irán al continente, separando a Amy de su amigo Arthur.
Mientras toda esta historia se desarrolla, también crece la intriga sobre las últimas palabras del padre de Arthur, cartas que esconde su madre y, la aparición de un francés de oscuro pasado y malvado, que pretende extorsionar a la Sra. Clennam con la revelación de un secreto.
Después de un escándalo financiero, en el cual la compañía floreciente de Doyce & Clennam, pierde su capital, Arthur es llevado a la prisión de Marshalea. Allí se enferma y, Amy (que regresó luego de la muerte de su padre), va a cuidarlo. Recién ahí, Arthur se da cuenta lo que siente por ella, pero no desea para ella una vida de pobreza y sufrimiento.
Amy le informa que es pobre nuevamente, porque su padre había invertido el dinero en el mismo banco que él.
La Sra. Clennam, le comunica a Amy el secreto que guarda (no lo voy a decir), presionada por el francés que la chantajea.
El socio de Arthur, vuelve rico de su gira por Rusia y lo libera.
Después de una vida de sufrimientos, Amy y Arthur, se casan. Así concluye la historia.
Los aspectos técnicos de la serie están muy bien cuidados, el vestuario, los lugares, la presentación.
Las actuaciones son muy buenas, especialmente, la Sra. Clennam (Judy Parfitt) y el Sr. Dorrit (Tom Courtenay). De Arthur Clennam me guardo la opinión, está de más que diga que me enamoré del personaje.

jueves, 8 de enero de 2009

Cine 2

Como en este verano caluroso no me iré de vacaciones, me lo estoy tomando para disfrutar del cine, la lectura y, sobre todo, dormir.
En los últimos días miré tres películas nuevas y he vuelto a ver varias de mis preferidas.
En esta entrada sólo mencionaré las nuevas.
The Duchess (La duquesa)
Keira Knightley encarna a Georgiana, duquesa de Devonshire, una mujer que fue considerada una celebridad en su época. Personaje de gran carisma y con una vida personal triste. Una extraña relación la unía con su esposo (interpretado por Ralph Fiennes), quien parece ser el único que no la considera adorable. Con el tiempo, la relación entre ellos se vuelve de lo más extraña, al punto que ella acepta convivir como familia con la amante de su esposo.
Las actuaciones principales son correctas, pero la película se queda un poco en la superficialidad, siendo la vida de Georgiana Spencer, mucho más complicada y trágica.


Frost/Nixon (El desafío: Frost contra Nixon)
Comencé a mirar esta película con todos los prejuicios, realmente pensaba que me iba a aburrir. Una cinta sobre política norteamericana de los años 70, no creía que fuera a gustarme demasiado. Pero me equivoqué, me resultó de lo más entretenida.
Basada en una obra de teatro, trata sobre la entrevista realizada por el conductor británico David Frost (Michael Sheen), al ex presidente norteamericano, Richard Nixon (Frank Langella), tres años después de su renuncia debido al escándalo del Watergate. De manera orginal, el director Ron Howard, nos muestra las negociaciones para llevar a cabo el reportaje, desde las perspectivas de ambos equipos y con momentos filmados al estilo documental.
El equipo de investigación de Frost le dará la dosis cómica a la película (que incluye una magnífica toma "trasera" de una corrida al mar). Matthew Macfadyen, es John Birt, el productor de la entrevista, con él, Oliver Platt y Sam Rockwell, como los expertos contratados para asesorar al conductor.
Me gustó que los actores principales no fuera maquillados para asemejarlos a los personajes reales, sino que sus actuaciones fueran lo que realmente importa. Creo que Langella es un buen candidato a las futuras premiaciones (aunque se enfrentará a un excelente Sean Penn).


The Accidental Husband (Marido por sorpresa)
Esta comedia romántica es protagonizada por Uma Thurman, quien interpreta a Emma Lloyd, una periodista radial que triunfa por sus consejos amorosos. Uno de ellos provoca que una joven abandone a su prometido a semanas de casarse. El dolido novio abandonado, es un bombero (Jeffrey Dean Morgan), que decide vengarse de ella falsificando su matrimonio con Emma.
Cuando Emma vaya con su prometido(Colin Firth),a preparar el papeleo para su boda, descubrirán que ella está casada y ahí comenzarán los enredos.
Entretenida pero demasiado predecible.